El día de ayer, el Pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo general la reforma al Poder Judicial, que tiene como objetivo la reestructuración y fortalecimiento del sistema judicial en México. Con 269 votos a favor, 205 en contra y 4 abstenciones, la iniciativa avanzó al siguiente paso legislativo, donde se discutirá y votará en lo particular.
La reforma, impulsada por el partido en el poder, propone cambios sustanciales en la organización y funcionamiento del Poder Judicial, incluyendo la creación de nuevos órganos, modificaciones en los procesos de selección y nombramiento de jueces y magistrados, así como la implementación de medidas para combatir la corrupción dentro del sistema.
Los grupos parlamentarios de oposición manifestaron su rechazo a la reforma, argumentando que vulnera la independencia judicial y concentra poder en el Ejecutivo. Por su parte, los legisladores que apoyaron la iniciativa destacaron la necesidad de modernizar el sistema judicial para hacerlo más eficiente y accesible.
Se espera que en los próximos días continúe el debate en la Cámara de Diputados, donde se presentarán reservas y se realizarán ajustes al dictamen antes de ser remitido al Senado para su revisión final.